¿Desde cuándo hay huevos de
pascua? ¿Cuál es su origen? ¿De dónde proviene esta tradición? ¿Por qué se
regalan huevos de chocolate el domingo de pascuas? ¿Qué significado tienen? ¿De
dónde proviene el conejo de pascua?
Las respuestas a estas preguntas las podrás encontrar a continuación.
La tradición de los huevos de pascua
La tradición de los huevos de
pascua y chocolate se ha transmitido de generación en generación y su
origen se remonta a tiempos antiguos, hace ya muchos, muchos siglos…
Todo surge debido a que, durante la Cuaresma, los cristianos tenían
prohibido comer huevos de gallina y productos lácteos. Así fue como los
creyentes, para no tirar los huevos (era considerado pecado), los bañaban con
una capa de cera líquida y los guardaban. Luego, al finalizar la cuaresma, los
entregaban como obsequio en la iglesia (el domingo de Pascuas).
Cuando la iglesia católica dejo de prohibirlos para su consumo en
cuaresma, las personas comenzaron a pintarlos, a decorarlos y regalarlos a sus
amigos.
A comienzos del siglo XIX, los pasteleros europeos decidieron realizar
los primeros huevos de chocolate con
regalos dentro, y así fue como la tradición comenzó a crecer cada vez más,
hasta convertirse en la celebración que todos conocemos actualmente.
Símbolos del huevo de pascua
Para los cristianos el huevo de
pascua simboliza nacimiento, vida nueva y resurrección. En roma y
Medio Oriente simbolizaba la fertilidad. Y en muchas ocasiones eran
regalados en las festividades de primavera, ya que simbolizaban el renacimiento
de la naturaleza.
En algunos países de Europa los huevos son decorados el jueves santo, y
se guardan para romperlos el domingo. La cáscara del huevo representa el
sepulcro de Jesús, y se quiebra el domingo de Pascua como símbolo de
resurrección.
Otras costumbres, asocian al huevo con los cuatro elementos del planeta.
La tierra está representada por la cáscara, el aire por la membrana, el agua
por la clara y el fuego por la yema.
¿Y el conejo de pascuas? ¿Cuál es su origen?
El origen del conejo de pascuas
no está muy bien definido como el del huevo de chocolate. Peso a esto,
se cree que el conejo se eligió porque es símbolo de fertilidad y
procreación.
A su vez, el conejo se asocia a la diosa fenicia Astarté, a quien se le
rendía homenaje en la festividad de Pascua. En alusión a esta diosa, en algunos
países de denomina a la Pascua como “Easter”
(que significa, festividad de la primavera). Así es como los anglosajones
transfirieron el nombre de la fiesta pagana a las tradiciones cristianas.
Otras tradiciones asocian el origen del conejo de pascuas con una leyenda: El relato cuenta que,
cuando Jesús fue introducido en el sepulcro, un conejo había quedado dentro de
la cueva, escondido y asustado al ver como la gente lloraba por la muerte de
Jesús.
Así fue como el conejo presenció la resurrección y, desde ese entonces,
es considerado como mensajero, quien debe llevar el mensaje de la buena nueva.
Y por último, otra versión afirma que el conejo de pascuas es una fantasía
inventada por los adultos, para crear ilusión en los niños. Así como en Navidad
el personaje es Papa Noél, en Pascuas el personaje sería el conejo. Por ello,
en algunos sitios se esconden los huevos para que sean buscados por los niños.